Oposición se alinea con la CUT y prepararán agenda para enfrentar reforma laboral del gobierno
Parlamentarios de oposición señalaron que el proyecto presentado el jueves “precariza” el empleo y sostuvieron que no apoyarán la idea de legislar de la medida.
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Un difícil escenario de tramitación legislativa se avizora para el proyecto de modernización laboral que el gobierno presentó el pasado jueves, el cual propone diversas medidas para la conciliación trabajo-familia e inclusión laboral.
Al rechazo firme de la Central Unitaria de Trabajores (CUT), se sumó de forma oficial el de los partidos políticos de la oposición, quienes ayer se reunieron con la directiva de la Central para definir la hoja de ruta a seguir en torno al tema.
“Es un proyecto que precarizará el empleo”, fue el diagnóstico común entre los asistentes a la reunión que se realizó en las dependencias de la multisindical y que se extendió por más de hora y media.
Pese a que la iniciativa aún no ingresa de forma oficial al Congreso -aunque el ministro del Trabajo Nicolás Monckeberg aseguró que será esta semana-, el presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, tiene claro el futuro de la propuesta: se debe rechazar la idea de legislar.
“Representa una amenaza a los derechos de los trabajadores, porque precariza las condiciones laborales en nuestro país, bajo el espejismo de que esto va a permitir que los trabajadores puedan determinar su jornada (...) va a permitir el abuso laboral, y va a generar mayor dificultades para conciliar el trabajo con la vida familiar”, sostuvo Elizalde, quien catalogó la propuesta como de “flexiinseguridad”, ya que a su juicio “flexibiliza las condiciones laborales, precariza el empleo y genera inseguridad para los trabajadores”.
Una opinión en la misma línea entregó el vicepresidente de la Democracia Cristiana, Rodrigo Albornoz, quien coincidió en el rechazo a la idea de legislar y agregó que coinciden con los argumentos que la Central entregó el pasado viernes en rechazo a la propuesta del Ejecutivo.
“Este proyecto de ley tiende a construir un mito, sobre la posibilidad de los trabajadores de poder acceder a ciertos beneficios, cuando en definitiva siempre las relaciones laborales se componen de un acuerdo con el empleador, y sabemos que en materia laboral hay una relación más bien asimétrica y no igualitaria”, planteó, señalando que como bancada trabajarán con la Central en la elaboración de una agenda laboral propia.
“Yo diría que es un proyecto, y esta es la opinión de la DC, que no tiende al mejoramiento de las remuneraciones, ni garantiza más días efectivos de descanso”, agregó Albornoz.
Desde el PPD, el titular del partido, Heraldo Muñoz, señaló que no se oponen a la flexibilidad laboral “siempre y cuando al otro lado de los empresarios estén sindicatos fuertes, que tengan la mínima simetría”.
En la reunión, además, participó Oscar Araya, del Partido Radical; Catalina Pérez de Revolución Democrática; Juan Andrés Lagos del Partido Comunista; y Mónica Quilodrán del MIR, entre otros.
CUT: “No es rechazar por rechazar”
Desde la multisindical, recalcaron que su postura no es rechazar a ciegas las medidas del Ejecutivo.
“Hay un punto en común que todos hemos compartido, acá no se trata de rechazar solo las malas iniciativas, no se trata solo de decir que los proyectos son malos, se trata de señalar que hay disposición de parte de los partidos de oposición para construir una agenda alternativa que permita poner los temas del trabajo donde realmente están las preocupaciones”, dijo la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, y agregó que el proyecto que busca reducir la jornada laboral a 40 horas sí va en la línea correcta.
En relación a la fórmula de trabajo con los partidos de oposición, la dirigente sindical recalcó que seguirán trabajando en coordinación con ellos, además de algunos centros de estudio, para levantar una agenda laboral propia que aporte al debate. “Esperamos seguir con estas reuniones, vamos a volver a convocarnos. Este proyecto no cuenta con las condiciones para que pueda ser legislado”, recalcó.
Por último, Figueroa insistió en la la finalidad de la mesa de trabajo con la oposición es que los trabajadores tengan certeza y seguridad de que “hay políticas públicas que protegen el empleo, protegen sus condiciones laborales, y que eso efectivamente puede ir de la mano con conciliación trabajo familia”.